El humorista y pastor cristiano santandereano, José Ordóñez, dio a conocer los proyectos humorísticos y de ayuda social que ya está realizando como antesala a su retiro de la comedia, que será en el año 2030, como informó a través de un Facebook Live que compartió con sus seguidores en la popular red social.
Ordóñez, que inició el video haciendo un rápido recorrido por su historia en el mundo del entretenimiento, informó que se retirará de la comedia en 2030 para seguir en el cumplimiento de otros proyectos en Bucaramanga. “Amo y me apasiona hacer humor. Y creo que aunque haya una fecha de retiro, igual seguiré haciendo reír de alguna u otra manera”, explicó Ordóñez.
“En agosto se cumple una etapa de nuestras vidas, donde mi esposa y yo decimos “ya los hijos se fueron” tal como lo dice el Salmo 127:4 Como flechas en las manos del guerrero son los hijos de la juventud… En agosto me voy a vivir a Bucaramanga. Vamos a estar viniendo a los Estados Unidos porque aquí están nuestros hijos y nietos pero nuestra base va a estar en Bucaramanga. En febrero del 2030 voy a dejar de hacer comedia”, puntualizó el santandereano.
El humorista reveló que entre sus proyectos futuros se encuentra la creación de una comunidad de comedia que vinculará a seguidores con comediantes que tendrán su base en Bucaramanga y que producirá humor para el canal de Youtube, las redes sociales y podcast.
Igualmente anunció una incursión más profunda en toda la industria del entretenimiento con responsabilidad social cristiana “compré unos lotes en donde voy a construir el parque de Benito, el parque Pablo Remalas y el parque Emparejados en la Mesa De Los Santos. Mi esposa está estudiando consejería matrimonial y junto con ella, nos dijimos vamos a regalarle a Colombia dos misioneros, tú y yo, y con ello, voy a construir un hotel-retiro en donde vendrán parejas con su hogar destruido para ser restaurado”, explicó José Ordóñez, que aseguró que las ganancias de estos proyectos irán para la construcción de escuelas en zonas deprimidas en Bucaramanga.
Foto: David Bernal / Revista Hechos&Crónicas
